Hoy vamos a hablar de seguros de viaje.
¿Qué sabemos todos? Que no hay que ser tan bestia como para viajar sin ellos.
¿Qué sabemos algunos? Que te protegen muchísimo menos de lo que vos pensás.
La industria del seguro de viaje tiene muchísimo para mejorar. Si bien de a poco aparecen players que intentan darle una nueva vuelta de tuerca, es muy común que a la larga recaigan en los mismos vicios y trampas de sus hermanos mayores.
No vamos a hablar de marcas, pero todos sabemos más o menos de quienes estamos hablando y, de hecho, el mundo de las aseguradoras es una suerte de fábrica china de productos white label.
Al final del día todos terminan reasegurándose en las mismas dos o tres empresas. Vamos a evitar las anécdotas, todo el mundo tiene historias para contar.
Algunas buenas, como lo bien que se portaron en tal empresa cuando a tu hijo le tuvieron que sacar el yeso. Y muchísimas malas, donde declinaron cubrirte por arbitrariedades diseñadas para cagarte.
Y son estas segundas las que son muchísimo más comunes que las primeras. Cuando uno contrata uno de estos seguros, lo mejor que puede pasarte es que no lo tengas que usar. Y muchas veces esa supuesta tranquilidad de tenerlo just in case es todo lo que hace falta para disfrutar de un viaje.
La letra chica del seguro de viaje internacional
Yo viajo muy seguido desde hace más de 20 años, y soy consumidor habitual de este tipo de seguro, el cual diría que en el 99% de los casos pagué sin molestar y nunca necesité. Pero si uno quiere realmente asegurarse de que está asegurado, entonces no basta con contratarlo, hay que aprenderse de memoria el contrato.
Hay que saberlo como si uno lo hubiese escrito. Por ejemplo, muchísima gente se cree que está cubierta con el seguro que le provee su tarjeta de crédito. No sólo para el titular sino también para sus acompañantes.
¿Pero acaso saben que ese mismo seguro va a declinar cobertura y te va a dejar tirado en un hospital extranjero con un ACV si todos los pasajes aéreos no fueron pagados con esa misma tarjeta?
O por ejemplo, que si pasa una emergencia y entre esto y aquello hasta poder resolverla y estar tranquilo para informarla transcurren más de 24 horas, ¿se rehusan a cubrirte?
¿O que si te lesionás jugando al fútbol amistosamente en la playa no te cubren porque muchos lo consideran una actividad de riesgo extremo?
La mejor de todas estas es que muchas veces cuando uno cree que va a estar cubierto eso implica que el centro de salud va a dialogar internamente con tu seguro y no molestarte mientras pasás momentos traumáticos en un hospital extranjero.
Think again.
En general, te hacen pagar por todo con promesa de "reembolso", el cual luego buscan excusas para no pagar, o pagan parcialmente porque sí.
Los montos que cubre el seguro de viaje
¿Vieron que uno puede comprar coberturas de 500k, 1M o 2M?
Bueno, todo verso.
Primero que esos números son resultantes de pequeñas sumas que se hacen de "Máximos a cubrir" por determinado sector o especialidad.
Con lo cual, si vos tenés un seguro de dos millones de dólares y te rompés los dientes y terminás en una clínica americana donde te restauran todas las teclas del piano por la módica suma de 50k, uno pensaría que está todo bien, ¿no?
50k es menos que 2M, o sea, ¡qué suerte que sacaste el seguro de 2M!
Pero no, resulta que el monto cubierto en "dental", por el seguro de 2M, es de 3k. El resto de tu bolsillo, o que Dios te ayude.
El monto máximo que gastó alguna vez una aseguradora de viajero fue en el orden de los 200k, y son casos hiper aislados. El resto es puro chamuyo y bien podrían venderte un seguro de 100M, que no cambiaría nada.
Seguro médico para viajar a Estados Unidos
Esta es la parte que realmente tienen que saber, y donde les pincho el globo y los vuelvo paranoicos y nunca más vuelven a salir de sus casas. Todo el mundo sabe que la salud en USA es extremadamente cara.
Es por eso que nadie va a USA sin un seguro de viajero. Lo que pocos saben es que USA es un país únicamente para gente sana. ¿Qué quiero decir con esto? Que vayas mientras puedas, porque desde el segundo en el cual tengas un episodio de salud un poquito más serio, te transformás en "inasegurable", sin importar que te sigan vendiendo el seguro una y otra vez.
Si vos tuviste un episodio de salud de cualquier tipo, entonces tenés un problema preexistente.
Ese problema preexistente va a ser que cualquier cosa que quieras intentar hacer cubrir en USA sea imputable a él.
Y por más que saques la cobertura de 2M, el monto cubierto para condiciones preexistentes o devenidas de aquellas preexistentes es de 0, 5.000 o 10.000 USD en los mejores casos.
¿Y qué hago con esta información? ¿No viajo nunca más?, se preguntará alguno. Hacé lo que quieras, pero mejor saber la verdad que andar pensando que contás con una seguridad que es absolutamente falsa.
Insisto, no todas las aseguradoras son igual de garcas. Pero lo que no existe en este rubro es la bondad.
Leete el contrato como si tu vida dependiera de ello, porque bien podría ser así. Nadie te va a decir "Che, te re entiendo, le puede pasar a cualquiera". Te van a frotar el contrato en la cara. Y tu única defensa es conocerlo tan bien, que les puedas hacer lo mismo.
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